Habla más suave Adam Zagajewski Habla más suave: eres mayor que aquel que fuiste tanto tiempo; eres mayor que tú mismo y sigues sin saber qué es la ausencia, el oro, la poesía. El agua sucia anegó la calle; una tormenta breve sacudió esta ciudad plana, adormecida. Cada tormenta es un adiós, cientos de fotógrafos parecen sobrevolarnos, inmortalizar con flash segundos de miedo y pánico. Sabes qué es el duelo, la desesperación violenta que ahoga el ritmo cardiaco y el futuro. Entre extraños llorabas, en un moderno almacén donde el dinero, ágil, sin cesar, circulaba. Has visto Venecia, y Siena, y en los lienzos, en la calle, jovencísimas, tristes Madonnas que ansiaban ser muchachas normales y bailar en carnaval. Has visto incluso pequeñas urbes, nada bonitas, gente vieja extenuada por el sufrimiento y el tiempo. Ojos de santos morenos brillando en iconos medievales, ojos ardientes de bestias salvajes. Entre los dedos cogías guijarros de la playa La Galere, y de pronto sentías por ell...