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Considerando en frío, imparcialmente... | César Vallejo

Considerando en frío, imparcialmente...

El poeta peruano César Vallejo sentado en una banca con las piernas cruzadas y la mirada y el rostro tristes
César Vallejo

Considerando en frío, imparcialmente,

que el hombre es triste, tose y, sin embargo,

se complace en su pecho colorado;

que lo único que hace es componerse

de días;

que es lóbrego mamífero y se peina…


Considerando

que el hombre procede suavemente del trabajo

y repercute jefe, suena subordinado;

que el diagrama del tiempo

es constante diorama en sus medallas

y, a medio abrir, sus ojos estudiaron,

desde lejanos tiempos,

su fórmula famélica de masa…


Comprendiendo sin esfuerzo

que el hombre se queda, a veces, pensando,

como queriendo llorar,

y, sujeto a tenderse como objeto,

se hace buen carpintero, suda, mata

y luego canta, almuerza, se abotona…


Considerando también

que el hombre es en verdad un animal

y, no obstante, al voltear, me da con su tristeza en la cabeza…


Examinando, en fin,

sus encontradas piezas, su retrete,

su desesperación, al terminar su día atroz, borrándolo…


Comprendiendo

que él sabe que le quiero,

que le odio con afecto y me es, en suma, indiferente…


Considerando sus documentos generales

y mirando con lentes aquel certificado

que prueba que nació muy pequeñito…


le hago una seña,

viene,

y le doy un abrazo, emocionado.

¡Qué más da! Emocionado… Emocionado…


César Vallejo


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